FIESTA DE LA VIRGEN DEL TRANSITO

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¿Cuando se celebra?

La fiesta grande de la Virgen se celebra el día 15 de agosto. Para ese día todas las calles están adornadas con banderines de colores rojo, azul y amarillo. Al final de la calle hay una gruta, que está situada en la mitad del cerro. Allí hay otra imagen de la Virgen de El Tránsito, más pequeña, que no está vestida, ya que su estructura y apariencia es de yeso. Pero la Virgen de la iglesia lleva un traje dorado acompañado de una toga azul, tiene el pelo larguísimo y eleva los brazos al cielo mientras su mirada se pierde en las alturas. A sus pies, hay una nube de la que emergen cabezas y alas de querubines que la miran con afecto mientras la cargan hacia lo alto.

¿De cuando data y que se celebra?

La iglesia del pueblo data del año 1766 y a pesar de que ha sido restaurada en varias ocasiones, aún tiene muestras visibles de deterioro en la fachada y grietas en su interior. La iglesia está adornada con cintas doradas en el techo, las que en línea recta van desde el altar hasta el portal de la entrada. En el retablo, detrás del altar, se pueden ver, a los costados, dos cuevas pequeñas, y una grande, en el centro. El centro del retablo, lugar que le corresponde a la Virgen del Tránsito, se encuentra vacío porque la imagen de la virgen ha sido bajada para la fiesta. Ella está en una plataforma, detrás del altar, con velas a sus pies y una tela dorada a sus espaldas, sobre la que se proyecta la sombra de la Virgen provocada por un foco que se coloca delante de la imagen. Llama la atención que la imagen de la Virgen tiene los brazos levantados en arco hacia el cielo, como en actitud de plegaria o de ascensión. El día 15, desde temprano, se percibe un ambiente más festivo, se escucha una práctica de la banda del baile toba, y en la calle principal.

¿Cual es la Tradición?

La tradición señala que el baile chino, el más antiguo y tradicional de la zona, tiene que llegar antes del inicio de la misa y saludar a la Virgen con los cantos dirigidos por su caporal. Al terminar la misa el baile chino comienza a tocar sus flautas suavemente para luego dar paso al caporal quien canta unos versos de saludo a la Virgen. El canto del caporal no puede escucharse con claridad producto de la edad del chino, que ya es muy avanzada para tener una voz potente que pueda entenderse en toda la iglesia. Cuando el canto se detiene, el sacerdote pide voluntarios para cargar la virgen durante la procesión; se acercan seis hombres que toman las andas de la imagen y la comienzan a mover hacia la entrada de la iglesia. Los cargadores van acompañados de unas señoras vestidas con trajes blancos cubiertos por una capa amarilla que combina con el color de vestimenta de la Virgen. Ellas son Las mujeres de la tercera edad, quienes habían bajado a la Virgen del retablo el día 10. Mientras la virgen avanza, los chinos no dejan de tocar a medida que retroceden lentamente hacia la plaza. Afuera están esperando los otros dos bailes, uno es el mismo que bailó el día anterior la cueca y la procesión en la plaza. El otro baile son unos caporales de los poblados de Pinte y La Arena, llamados Florecer del valle y tienen pintados en el estandarte la Virgen de La Merced y San José Obrero. Llama la atención que las dos bandas que acompañan a los dos bailes, están formadas, en su mayoría por niños.